¿Qué técnicas se incluyen en la terapia manual?

En entradas anteriores hemos visto ¿Qué es la terapia manual?, y si partimos de su definición (conjunto de técnicas para evaluar y tratar cualquier alteración corporal) podemos hacernos a la idea de lo amplia que puede llegar a ser. Además, hemos explicado aplicaciones concretas para los brazos, las piernas y la espalda.

Partiendo de la importancia de la terapia manual dentro de la fisioterapia, hoy queremos explicar que técnicas son las que forman parte de ella. Para ello, vamos a clasificarlas según el objetivo que tienen.

 

Técnicas de articulares

Comenzamos con las técnicas enfocadas mejorar la articulación, que buscan mejorar la movilidad y reducir el dolor mediante el control del movimiento. Para conseguirlo se utilizan las movilizaciones pasivas, también pasivas pero combinadas con movimiento activo del paciente, las manipulaciones y otros tipos específicos, como puede ser el método Maitland. Para conseguir la mejoría a través de la descompresión se utilizan las tracciones, que puede ser a nivel de columna vertebral (para aliviar la presión de los discos intervertebrales) o en las articulaciones.

 

Técnicas de manipulación de tejidos blandos

Para aliviar restricciones y tensiones se realizan técnicas enfocadas a la parte muscular, miofascial y tejidos conectivos. El masaje es la técnica más famosa dentro de este apartado, pero como podéis comprobar no es la única técnica que se utiliza en fisioterapia. Además, para el tejido blando se usa la presión sostenida para liberar la restricción de la fascia, esto se conoce como liberación miofascial. El drenaje linfático manual para estimular el sistema linfático a través de movimientos lentos y suaves con el objetivo de mejorar el linfedema. Para desactivar los puntos gatillo del músculo se realiza una presión directa y mantenida sobre ellos, este proceso se puede denominar técnica de puntos gatillo. En este apartado también se engloba el Cyriax, en el siguiente video podéis ver en que consiste.

 

Técnicas de músculo-energía

Dentro de las técnicas de energía muscular, las dos partes tienes que trabajar de forma conjunta, tanto fisioterapeuta como paciente. El sanitario aplicando la resistencia en el momento adecuado y el paciente realizando contracciones musculares. Se utilizan tres tipos: la inhibición recíproca (relajación del músculo al contraer el antagonista), el estiramiento post-isométrico (la relación muscular después de la contracción isométrica corta) y la facilitación neuromuscular propioceptiva, conocida como FNP (estiramientos asistidos que se combinan con patrones de movimiento concretos).

 

Movilización neural

Cada vez se está trabajando más sobre el nervio dentro de la terapia manual, son técnicas esenciales para trabajar el dolor neuropático. Para ello, se utilizan dos alternativas, la neurodinámica (técnicas de Butler) y los deslizamientos nerviosos. En ambas se deben realizar movilizaciones concretos y suaves para mejorar el movimiento del nervio, y siempre deben ser indoloras.

 

Técnicas de manipulación visceral

Es importante no olvidar la parte visceral, ya que va a generar restricciones, sobre todo fasciales. Se realizan movilizaciones suaves de los órganos internos mediante técnicas trasnversas, movilizaciones concretas, etc.

 

Técnicas de integrativas y globales

Para influir en el sistema nervioso central y el equilibrio de determinadas estructuras se utiliza la terapia craneosacral. Ésta se basa en movimientos muy suaves para liberar restricciones en el líquido cefalorraquídeo, en muchas ocasiones guiadas por la respiración.

Para corregir patrones disfuncionales, se realiza un ajuste pasivo en puntos específicos para liberar tensiones a través del posicionamiento de tensión mínima, conocido como técnica de Jones.

 

Otras técnicas

Para finalizar con las técnicas de terapia manual también se deben enumerar algunos métodos concretos y situaciones excepcionales de tratamiento.

Dentro de la terapia manual ortopédica que se utiliza para evaluar y tratar el sistema musculoesquelético, están las técnicas de Kaltenborn (movilizaciones específicas basadas en biomecánica articular) y el método Mulligan (movilización con movimiento además de corrección postural).

Englobado en situaciones concretas, podemos comprobar como la terapia manual se adapta a situaciones excepcionales, por ejemplo en el embarazo, el masaje infantil, el masaje del cólico del lactante, etcétera.

En la mayoría de los pacientes se utiliza una combinación de técnicas para resolver los problemas que presenta. En el siguiente video, sobre terapia manual en el pie, podéis ver un ejemplo, ya que se observan movilizaciones, tracciones y técnicas musculares, como la masoterapia.

 

La terapia manual es una parte de la fisioterapia muy versátil, que combina diferentes técnicas para tratar las necesidades específicas de cada paciente. Desde el trabajo en las articulaciones y los músculos, hasta enfoques más integrales como la movilización neural o visceral, cada técnica tiene como objetivo mejorar la movilidad, aliviar el dolor y conseguir el bienestar general. No importa si se trata de un problema puntual o una lesión crónica: hay herramientas adaptadas para cada situación.

Cada tratamiento es personalizado, buscando siempre la combinación adecuada de técnicas para obtener los mejores resultados. Así que, si tienes alguna duda o curiosidad sobre cómo puede ayudarte, no dudes en consultarnos. La clave para una vida más saludable está en el cuidado adecuado de tu cuerpo, y la terapia manual es una excelente aliada para ello.

Dejar un comentario

Todos los comentarios son moderados antes de ser publicados

Shop now

FIMEFY, tu portal de terapia percusiva